Con el paso del tiempo, la Inteligencia Artificial (IA) ha experimentado avances significativos que impulsan el crecimiento empresarial en sectores como salud, transporte, logística, finanzas, comercio minorista, marketing, entre otros. En este contexto, uno de los desarrollos más innovadores ha sido la denominada IA agéntica: una forma de inteligencia artificial que, a diferencia de otros sistemas que se limitan a procesar información o generar recomendaciones, posee la capacidad de interactuar con su entorno y ejecutar tareas de manera autónoma.
En este artículo exploraremos qué es la IA agéntica, cómo funciona y cuáles son sus principales características.
¿Qué es la IA agéntica?
La IA Agéntica hace referencia a sistemas de software diseñados para operar en entornos específicos y tomar decisiones de forma independiente sin requerir intervención humana directa, con el fin de alcanzar objetivos definidos.
Estos agentes emplean diversas técnicas de IA que les permiten desarrollar capacidades como la memoria, la planificación, la percepción del entorno, el uso de herramientas, el cumplimiento de normas de seguridad, la ejecución de tareas específicas o la resolución de problemas de manera autónoma o semiautónoma.
Además, estos sistemas no solo toman decisiones basadas en datos disponibles, también aprenden de la experiencia y se adaptan a nuevas situaciones, contribuyendo así a la productividad y al logro de metas organizacionales.
¿Cómo funciona?
Los agentes de la IA agéntica operan a partir de cuatro componentes fundamentales que les permiten actuar de forma autónoma e inteligente:
· Percepción: A través de sensores o interfaces de software, los agentes recopilan información del entorno, la cual puede incluir datos visuales (cámaras), auditivos (micrófonos), textuales (documentos o imágenes), sensoriales (sensores de temperatura), entre otros.
· Razonamiento: Utilizando algoritmos de aprendizaje automático, técnicas de razonamiento lógico y métodos de generación aumentada por recuperación (retrieval-augmented generation), los agentes procesan la información recopilada para comprender el estado del entorno, las tareas asignadas, identificar patrones y tomar decisiones informadas.
· Acción: Mediante herramientas, softwares externos e interfaces de programación de aplicaciones (API), los agentes ejecutan las acciones planificadas. En esta etapa, pueden integrarse mecanismos de seguridad para garantizar una ejecución adecuada y confiable de las tareas.
· Aprendizaje: A través de ciclos de retroalimentación, los agentes evalúan los resultados de sus acciones y los datos generados por sus interacciones. Posteriormente, actualizan sus modelos y algoritmos para mejorar su rendimiento y adaptarse a nuevas situaciones.
¿Cuáles son sus ventajas a nivel organizacional?
· Incremento en la satisfacción del cliente: La implementación de la IA agéntica permite ofrecer una atención más rápida, eficiente y personalizada, anticipándose a las necesidades de los usuarios con base en el análisis de datos.
· Mejora la productividad y la creatividad: Al delegar tareas operativas a los agentes, los colaboradores pueden enfocarse en actividades estratégicas, creativas y en la resolución de problemas complejos.
· Optimización de los flujos de trabajo: Los agentes de IA pueden acelerar significativamente la ejecución de tareas, mejorando los tiempos de respuesta y la eficiencia operativa.
Dato importante: Según Gartner, para 2028 se estima que al menos el 15% de las decisiones cotidianas relacionadas con el trabajo se tomen de manera autónoma con ayuda de la IA.
¿Quieres más información?
Contacta a nuestros expertos